Diez minutos

Diez minutos para quedarse dormido,
para volver a ser-yo-ya-ahora,
para posarme sobre tus ojos
que me voy besando hacia la almohada.

Diez minutos y una luna
con colmillos invertidos
sobre mi cuello nocturno y tuyo,
sobre mis uñas heladas por el asfalto.

Diez minutos por vivir
para llegar a mi tumba
de sábanas verdes y losas
que me acarician con la muerte.

Diez minutos para hundirme
en tu pelo recién enroscado
en torno a mis muñecas
que, en el sueño, ya no te olvidan.

Comentarios

Entradas populares