Lo malo (O un baile sobre el tejado)

Lo malo no fue construir
la casa por el tejado
lo peor fueron las tejas,
el hierro de forja,
el encofrado
y el hueco de chimenea.

En el hogar un tronco
y una llama...
Un incendio controlado
que arde en una cuna
a fuerza de oxígeno
y abrazos.

Lo malo no fue conocerte,
ni siquiera querer olvidarte,
lo peor fueron los recuerdos,
las caricias,
las sensaciones
y esta ausencia de ser dos.

(Entonces, llegaste con la comisura de los labios
y la humedad del rocío helado sobre el tejado).